domingo, 21 de marzo de 2010

SOBRE LA SUBIDA DEL IVA

El reto de hacer más con menos recursos (El País)

España se enfrenta a la peor crisis de su historia con menos herramientas fiscales que en otras épocas. En los últimos 10 años de bonanza económica, antes de que la recesión estallase, el país ha experimentado diferentes reformas fiscales con un solo objetivo: bajar los impuestos a los ciudadanos, una medida que el propio José Luis Rodríguez Zapatero llegó a considerar "de izquierdas". Con la carestía en las cuentas públicas, el Gobierno ha tenido que dar un giro radical a ese discurso promovido tanto por el Partido Popular como por el PSOE. Los datos azuzan: la presión fiscal ha caído casi tres puntos en un solo año, hasta situarse en el 30,4% del PIB en 2009.

Sin derrochar pedagogía aún, el Ejecutivo ha empezado a predicar las bondades de contar con recursos públicos. Tras bajar el IRPF, el impuesto de sociedades y eliminar el de patrimonio, la vicepresidenta y ministra de Economía, Elena Salgado, ha reconocido que quizá fue un error suprimir este último tributo cuando las dentelladas de la crisis eran ya evidentes, como también lo fue inyectar 400 euros del IRPF en el bolsillo de los ciudadanos. El fin de esa medida, impulsar el consumo, no se cumplió, como lo demuestra la evolución que ha experimentado la tasa de ahorro en este periodo. El porcentaje de la renta disponible que los españoles han destinado a la hucha ha subido a un máximo del 18,7%, la mayor cifra al menos desde el año 2000. Eso demuestra que la recuperación depende en gran medida de la confianza en que ésta se produzca.

Otro de los elementos que ayuda al Ejecutivo a defender la subida fiscal reside en la comparación europea. Sólo Luxemburgo y Chipre tienen un tipo general del IVA más bajo que el español, que aun con la subida al 18% seguirá estando por debajo de la media.