Ayer comenzaron los actos de celebración de los primeros cincuenta años del Grupo Scout de El Pilar. El grupo más antiguo de la ciudad por el que han pasado miles de jóvenes que confían que un mundo mejor es posible. Se rindió un homenaje a su fundador, Pepe Berraquero. He aquí el discurso que se leyó a los postres de la cena.
"Hace ya unas semanas, me encargaron la tarea de preparar unas palabras para que, en nombre de todos los aquí presentes, se las dirija a Don José María Berraquero y Díaz en el comienzo de los actos de conmemoración del 50 aniversario del grupo scout ntra. Sra. Del Pilar.
Tengo que reconocer que he intentado varias veces comenzar un discurso dirigido a Pepe Berraquero, como fundador del Grupo, y no me salían palabras. No me salían las palabras de tantas cosas que quiero decir, de tantos recuerdos, de tanto agradecimiento.
Las resumo en una, Pepe gracias. Gracias por fundar el primer grupo scout de la actual Diócesis de Jerez. Gracias por dedicar tantos años de esfuerzo en la educación integral de cientos y cientos de jóvenes, por sembrar el escultismo en nuestras vidas.
De esa siembra, todos los que estamos aquí presentes somos la prueba, se ha recogido una muy fructífera cosecha. Porque el primer grupo scout de Jerez ha generado, durante cincuenta años, muchas generaciones de jerezanos y jerezanas que han aprendido a devolver a la sociedad los principios de responsabilidad, servicio a los demás, dedicación, trabajo en grupo que todos y todas hemos aprendido.
Muchas y distintas son las labores, las tareas, las profesiones a los que todos los que estamos aquí desempeñamos día a día. Siempre tienen la impronta de todo lo vivido, de todo lo prendido durante nuestra infancia y juventud en el grupo scout del Pilar.
Pepe, quizá no seas consciente de todo lo bueno que has repartido entre todos nosotros. De todo lo bueno que nos has regalado. Porque los principios del escultismo, fe, responsabilidad y país, en distinta medida en las vidas de todos y cada uno de los que aquí estamos nos ha marcado la vida y la de los que nos rodean.
Gracias pepe, esa es la palabra que resume todo lo que quiero decirte. Desde el primer campamento del grupo, como Baden Powell en la isla de Brownsea, hasta hoy cincuenta años han pasado. Durante este tiempo miles de niños y niñas han pasado por el escultismo. Una Promesa y una Ley nos enseñaron a trabajar para los demás. Siempre listos todos estamos. Todos, incluyendo a pepe. Cincuenta años después. Una vez scout, siempre scout.
Gracias Pepe. Te queremos."
Tengo que reconocer que he intentado varias veces comenzar un discurso dirigido a Pepe Berraquero, como fundador del Grupo, y no me salían palabras. No me salían las palabras de tantas cosas que quiero decir, de tantos recuerdos, de tanto agradecimiento.
Las resumo en una, Pepe gracias. Gracias por fundar el primer grupo scout de la actual Diócesis de Jerez. Gracias por dedicar tantos años de esfuerzo en la educación integral de cientos y cientos de jóvenes, por sembrar el escultismo en nuestras vidas.
De esa siembra, todos los que estamos aquí presentes somos la prueba, se ha recogido una muy fructífera cosecha. Porque el primer grupo scout de Jerez ha generado, durante cincuenta años, muchas generaciones de jerezanos y jerezanas que han aprendido a devolver a la sociedad los principios de responsabilidad, servicio a los demás, dedicación, trabajo en grupo que todos y todas hemos aprendido.
Muchas y distintas son las labores, las tareas, las profesiones a los que todos los que estamos aquí desempeñamos día a día. Siempre tienen la impronta de todo lo vivido, de todo lo prendido durante nuestra infancia y juventud en el grupo scout del Pilar.
Pepe, quizá no seas consciente de todo lo bueno que has repartido entre todos nosotros. De todo lo bueno que nos has regalado. Porque los principios del escultismo, fe, responsabilidad y país, en distinta medida en las vidas de todos y cada uno de los que aquí estamos nos ha marcado la vida y la de los que nos rodean.
Gracias pepe, esa es la palabra que resume todo lo que quiero decirte. Desde el primer campamento del grupo, como Baden Powell en la isla de Brownsea, hasta hoy cincuenta años han pasado. Durante este tiempo miles de niños y niñas han pasado por el escultismo. Una Promesa y una Ley nos enseñaron a trabajar para los demás. Siempre listos todos estamos. Todos, incluyendo a pepe. Cincuenta años después. Una vez scout, siempre scout.
Gracias Pepe. Te queremos."