Las manifestaciones celebradas en el día de hoy en toda España, a las que no he podido acudir por estar postrado en cama y las he tenido que seguir por internet y twitter, han puesto sobre el tapete la constestación social a la durísima reforma laboral que aprobó por Real Decreto Ley el Gobierno del Partido Popular el pasado viernes.
Hemos retrocedido, me atrevo a decir, siglo y medio en el derecho laboral que deja a la interpretación de una de las partes la aplicación de los contratos. Vuelve el amo, vuelve ,me temo, el sindicalismo de finales del XIX y principios del XX. La ley de la selva, vamos.
He estado repasando la crisis de 1929, sus causas, sus efectos y las medidas que se adotaron para salir de ella. La salida estuvo basada en cuatro tipos de medidas que son:
- las Financieras:
- Se ayuda a los bancos mediante una participación en su capital.
- Se procede a una devaluación del dólar, con el objetivo de crear inflación que a su vez estimule la economía.
- las Agrícolas:
- Se estimuló el descenso de la producción pagando a los agricultores una indemnización por dejar de producir. El objetivo era que los precios aumentaran.
- las Industriales:
- Se promovió el aumento de salarios.
- Se disminuyen las horas de trabajo.
- las Sociales:
- Se llevan a cabo grandes inversiones en obras públicas.
- Medidas de protección social que aseguran el poder adquisitivo de la población, el objetivo es que aumente el consumo.
En resumen, protección social para paliar la gravisima situación de pobreza de los más desfavorecidos y fomento del consumo (subiendo sueldos, disminuyendo horas de trabajo,,,), introduciendo dinero en el mercado ya con obras públicas, ya subvencionando la bajada de la producción agrícola. Estimulando la economía.
España está, económica y monetariamente hablando, en manos de Bruselas. Tenemos una Unión Monetaria pero no hay política de defensa de la economía nacional. El ejemplo de Grecia, Portugal, Irlanda e Italia tiene que hacer reaccionar a nuestro Gobierno que se ha dedicado a regular drásticamente el derecho laboral y se ha olvidado de lo más importante,,,,regular el mercado bancario que está, ahora sí, recibiendo dinero del Banco Central Europeo a tipos de interés bajos y a devolver a tres años y en vez de inyectar dinero en las familiar y en las empresas lo están dedicando a la deuda soberana de países como Italia que le da más y mejor rentabilidad.
Regulen el mercado bancario y estimulen la economía. No les han votado los ciudadanos para que les fastidien la existencia sino para que busquen soluciones,,,,aceptables por todos, no sólo por los empresarios.